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En el sector femenino, Khandi Alexander, ex 'CSI: Miami', deja trás una serie con tanto numerito tecnológico que no da tiempo a tener un guión digno a tener en cuenta. Ahora, en un papel mucho más fuerte y profunda, Alexander puede llegar incluso a enamorar a la crítica. La búsqueda de su hermano desaparecido es una de las pocas tramas que se presenta en este primer episodio de la serie.

Kim Dickens está grandiosa. Una asidua a participar en series de televisión, incluso en 'Perdidos', se pone al frente de un restaurante, una llama de esperanza y normalidad en una dañada Nueva Orleans. Su personaje, Janette, sigue conservando sus botellas de vino caras para ese día en el que todos los dagnificados puedan volver a sentarse con normalidad en sus mesas a disfrutar de su menú.

¿Y Melissa Leo? Ya sabía yo que no me podía quedar con ningún actor.

Los actores están grandes, y tal vez David Simon se haya centrado tanto en ellos que haya perdido peso en la trama. Aunque no resulta aburrida y da pie a que veamos la serie, ya renovada para una segunda temporada, hasta el final, si que hay que decir que posee una narrativa lenta que no se caracteriza por la acción, los momentos sorprendentes o una trama que de continuidad y enlace con el resto de los episodios para retenerte, en mi caso, delante del ordenador.

'Treme' es buena, si. La preparación de la ciudad y la escenificación de cada casa es sublime. Pero se ha dejado una buena dosis de enganche por el camino.